I.- ANTECEDENTES.- La política de venta y cancelación/devolución de nuestros TPV (terminales de punto de venta) denominados también POS (Point of Sales, en inglés), aplicable a nuestro establecimiento* queda sujeta en todo punto a la segunda Directiva de servicios de pago , la Directiva (UE ) 2015/2366 , de 25 de noviembre de 2015 sobre servicios de pago en el mercado interior y por la que se modifican las Directivas 2002/65/CE, 2009/110/CE y 2013/36/UE y el Reglamento (UE ) n.º 1093/2010 y se deroga la Directiva 2007/64/CE del Parlamento Europeo y del Consejo , de 13 de noviembre, conocida como PSD2.
Esta Directiva recoge los principios fundamentales de la anterior y avanza en determinados aspectos clave referidos a nuevos servicios y proveedores, favoreciendo tanto la innovación, como una profundización en la regulación de la seguridad y la protección de los usuarios de servicios de pago en los pagos realizados en comercio electrónico y en la utilización de servicios que hasta ese momento se venían prestando al margen de la regulación, en particular la iniciación de pagos y la información sobre cuentas.
Dicha Directiva fue transpuesta de forma parcial en nuestro ordenamiento jurídico a través del Real Decreto-ley 19/2018, de 23 de noviembre, de servicios de pago y otras medidas urgentes en materia financiera, y, de forma total a través del Real Decreto 736/2019, de 20 de diciembre, de régimen jurídico de los servicios de pago y de las entidades de pago y por el que se modifican el Real Decreto 778/2012, de 4 de mayo, de régimen jurídico de las entidades de dinero electrónico, y el Real Decreto 84/2015, de 13 de febrero, por el que se desarrolla la Ley 10/2014, de 26 de junio, de ordenación, supervisión y solvencia de entidades de crédito.
Por su parte, el Real Decreto-ley 19/2018, de 23 de noviembre, de servicios de pago y otras medidas urgentes en materia financiera, en sus Títulos II y III recoge los derechos de información y condiciones de uso de tales terminales de pago.
De conformidad con las normas trascritas, se han fijado las siguientes:
- Se comprobará que el usuario está en disposición de la tarjeta física (de débito o crédito).
- Se comprobará la identidad del usuario en cuestión como titular de la referida tarjeta física (sólo en el caso de ser ello posible, se guardará copia del documento acreditativo de su identidad, como pasaporte, DNI/NIF, etc. Y, por tanto, previo su consentimiento escrito), así como el hecho de que es mayor de edad, y, por tanto, capaz de obrar.
- Se guardará el ticket de compra, junto con el contrato o factura abonada, y, en su caso, copia del documento acreditativo de la identidad del titular de la tarjeta.
- En el supuesto de pagos mediante medios electrónicos a distancia, se requerirá y guardará autorización al mismo, debidamente suscrita.
- En todo caso, en el documento soporte de la operación, ya sea contrato o factura, se recogerá con total claridad, la información precisa respecto del bien o servicio cuyo pago se está abonando.
- No se hubiera procedido conforme a nuestra política de ventas, salvo fuerza mayor o causa debidamente justificada; Y,
- Siempre y cuando el proveedor de servicios de pago electrónicos, o el propio usuario, hubiera comunicado la petición de cancelación o devolución en el plazo legalmente previsto para ello o plazo de desistimiento según normativa aplicable o de consumidores y usuarios y/o en función del bien o servicio de que se trate, dando a nuestro establecimiento al menos el plazo de quince días hábiles para alegar lo que a su derecho convenga y aportar los soportes o documentos que tenga a bien.
- No se devolverán ni/o cancelarán aquellos bienes o servicios que hubieran sido debidamente publicitados como “no reembolsables”.